El hombre ha creado tantas formas de expresión como a tenido a la mano, elementos para llevarlas a cabo; sin duda alguna una de las mas informales, a su vez llamativas y sencillas ha sido el graffiti. Desde tiempo atrás se ha logrado llevar la opinión y las ideas de un hombre a un contexto más universal gracias a la habilidad de escribir y pintar en las paredes, pero para que una simple frase o dibujo se convierta en parte del arte del graffiti debe por lo menos tener en cuenta algunos puntos de referencia, sin ser estos normas totalitaristas; así toda raya en la pared que se haga llamar graffiti debe contar con una forma, un relleno, un borde, un fondo, una nube, power line, algo de brillo, un destello, y una sensación de 3D, algunos remates, sin faltar la conexión, flechas, estilo o algo indispensable, la firma del autor e inscripciones para que el graffiti tenga contexto y sentido no se debe excluir ninguna forma, porque de lo contrario nuestra creación solo será un rayón mas en el muro.
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Conceptualizando, el graffiti es el resultado de pintar en las paredes letreros frecuentemente de contenido político o social, con o sin el permiso del dueño del inmueble; el letrero o conjunto de letreros de dicho carácter que se han pintado en un lugar son sin duda una forma de expresión que se ha utilizado desde los tiempos del imperio romano y que ha dado la oportunidad a la juventud rebelde o inconforme en los tiempos actuales para dejar claro su posición y formar una obra de arte tan grande como su imaginación lo indique, de allí que el graffiti se trasforma más que en vandalismo en arte urbano que pasa de ser un montón de letras o frases sin sentido y se convierte en la forma más clara de opinar sin ser juzgado o atacado por lo dicho.
Por ello, los graffitis en todas sus formas desde los tag, bubble letters hasta el graffiti abstracto, que comenzó junto con el movimiento artístico del mismo nombre, diferenciado de la Pintura o como subcategoría de la misma, con su origen en el siglo XX, fue un movimiento iniciado en los años 1960 en Nueva York, o según aluden fuentes bibliográficas como getting from the underground, en Filadelfia, de ahí una razón más para afirmar que el graffiti se convierte en una forma sub-real de dar a conocer la ideas y pensamientos sin ser relevante y mucho menos una expresión de vandalismo.
Una forma clara del diseño y de la expresión estética sin duda son los buenos graffitis, aquellos que llaman la atención en segundos y asimismo nos muestran un mensaje de una forma clara, contundente, llamativa y representante de la cultura urbana que se mostrará en cada pared o edificio de la ciudad y será perfecto en su estructura generando opiniones a favor o en contra, que es lo que se busca con una expresión artística comunicativa como los graffitis. De ahí, que todo lo que se crea a través de la imaginación del ser individual y conlleva a la opinión grupal será siempre una signo de cultura social que no necesita de papel y lápiz, ni tiene límites de público, permaneciendo por largo tiempo para que el mensaje perdure.
En la actualidad el arte esta siendo subvalorado y tomado solo como pieza decorativa para ciertos sitios específico en casa o en la ciudad en el caso de estatuas y esculturas que recuerden o hagan memoria a la historia o simplemente una figura, que tendrá una base en el cual también se hará arte urbano con grafitis como formas de expresión pocos estéticos y obscenos; un ejemplo de esto se puede constatar en la ciudad de Ocaña; llevando así a la desvalorización de la cultura, la comunicación y buscando netamente el comercio de este nuevo objeto que brinda estatus social a sus dueños, en el caso de pinturas, esculturas y demás objetos de este tipo que son de colección y exclusividad en el mundo, aunque ni ellos mismos conozcan los más mínimos detalles acerca de estos o no se tenga una interpretación de dichas obras.
Sin embargo a pesar que en nuestra la ciudad los grafitis sean del tipo Dirty o basura, existen otras partes en las que estos intentan exponer otra salida al futuro del arte que solo tiene su enfoque mercantil, tanto como una forma de expresión como del mismo arte al ir evolucionando como lo ha hecho, llegando a constituirse como grafiti abstracto perdiendo su propia identidad pues a pesar de contar con los rasgos comunes en las nuevas tendencias se ve afectado en sus características, siendo abordado desde otras disciplinas en construcción o ya establecidas por los enfoques o puntos desde los cuales se puede enfrentar a paradigmas en formación.
Es así que el grafiti no representa una postura idealista frente al “realismo mercantilista” vigente desde el arte porque al igual que él en algún momento llegará a ser comercializado, es decir, el grafiti cambiará su concepción y dejará de lado su esencia. En cambio si hablamos de una pintada o mural con estilo en lugares prohibidos y que no haga parte ni de la publicidad u otro tipo de identidad establecido, que mantiene sus inicios y no llega a los extremos en los que poco a poco ha ido cayendo mantendrá una postura idealista vigente fuera del arte volviendo a su expresión urbana narrativa y estética para ser comprendido por cualquiera que lo lea o interprete en el lugar público y visible en donde se encuentre, siendo así un elemento comunicativo no convencional ante la sociedad.
En conclusión el graffiti será un elemento antiguo que perdurará en su esencia y a la vez evolucionará sin perderla con el tiempo, siendo abordado desde disciplinas en construcción como los imaginarios sociales dentro de las narrativas urbanas, para su análisis y estudio pero no alterándolos sino generando nuevos paradigmas y conocimientos
POR: Lina Rocío Barbosa Dueñas 310098
Milany Patricia Pallares Carrascal 310103
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Conceptualizando, el graffiti es el resultado de pintar en las paredes letreros frecuentemente de contenido político o social, con o sin el permiso del dueño del inmueble; el letrero o conjunto de letreros de dicho carácter que se han pintado en un lugar son sin duda una forma de expresión que se ha utilizado desde los tiempos del imperio romano y que ha dado la oportunidad a la juventud rebelde o inconforme en los tiempos actuales para dejar claro su posición y formar una obra de arte tan grande como su imaginación lo indique, de allí que el graffiti se trasforma más que en vandalismo en arte urbano que pasa de ser un montón de letras o frases sin sentido y se convierte en la forma más clara de opinar sin ser juzgado o atacado por lo dicho.
Por ello, los graffitis en todas sus formas desde los tag, bubble letters hasta el graffiti abstracto, que comenzó junto con el movimiento artístico del mismo nombre, diferenciado de la Pintura o como subcategoría de la misma, con su origen en el siglo XX, fue un movimiento iniciado en los años 1960 en Nueva York, o según aluden fuentes bibliográficas como getting from the underground, en Filadelfia, de ahí una razón más para afirmar que el graffiti se convierte en una forma sub-real de dar a conocer la ideas y pensamientos sin ser relevante y mucho menos una expresión de vandalismo.
Una forma clara del diseño y de la expresión estética sin duda son los buenos graffitis, aquellos que llaman la atención en segundos y asimismo nos muestran un mensaje de una forma clara, contundente, llamativa y representante de la cultura urbana que se mostrará en cada pared o edificio de la ciudad y será perfecto en su estructura generando opiniones a favor o en contra, que es lo que se busca con una expresión artística comunicativa como los graffitis. De ahí, que todo lo que se crea a través de la imaginación del ser individual y conlleva a la opinión grupal será siempre una signo de cultura social que no necesita de papel y lápiz, ni tiene límites de público, permaneciendo por largo tiempo para que el mensaje perdure.
En la actualidad el arte esta siendo subvalorado y tomado solo como pieza decorativa para ciertos sitios específico en casa o en la ciudad en el caso de estatuas y esculturas que recuerden o hagan memoria a la historia o simplemente una figura, que tendrá una base en el cual también se hará arte urbano con grafitis como formas de expresión pocos estéticos y obscenos; un ejemplo de esto se puede constatar en la ciudad de Ocaña; llevando así a la desvalorización de la cultura, la comunicación y buscando netamente el comercio de este nuevo objeto que brinda estatus social a sus dueños, en el caso de pinturas, esculturas y demás objetos de este tipo que son de colección y exclusividad en el mundo, aunque ni ellos mismos conozcan los más mínimos detalles acerca de estos o no se tenga una interpretación de dichas obras.
Sin embargo a pesar que en nuestra la ciudad los grafitis sean del tipo Dirty o basura, existen otras partes en las que estos intentan exponer otra salida al futuro del arte que solo tiene su enfoque mercantil, tanto como una forma de expresión como del mismo arte al ir evolucionando como lo ha hecho, llegando a constituirse como grafiti abstracto perdiendo su propia identidad pues a pesar de contar con los rasgos comunes en las nuevas tendencias se ve afectado en sus características, siendo abordado desde otras disciplinas en construcción o ya establecidas por los enfoques o puntos desde los cuales se puede enfrentar a paradigmas en formación.
Es así que el grafiti no representa una postura idealista frente al “realismo mercantilista” vigente desde el arte porque al igual que él en algún momento llegará a ser comercializado, es decir, el grafiti cambiará su concepción y dejará de lado su esencia. En cambio si hablamos de una pintada o mural con estilo en lugares prohibidos y que no haga parte ni de la publicidad u otro tipo de identidad establecido, que mantiene sus inicios y no llega a los extremos en los que poco a poco ha ido cayendo mantendrá una postura idealista vigente fuera del arte volviendo a su expresión urbana narrativa y estética para ser comprendido por cualquiera que lo lea o interprete en el lugar público y visible en donde se encuentre, siendo así un elemento comunicativo no convencional ante la sociedad.
En conclusión el graffiti será un elemento antiguo que perdurará en su esencia y a la vez evolucionará sin perderla con el tiempo, siendo abordado desde disciplinas en construcción como los imaginarios sociales dentro de las narrativas urbanas, para su análisis y estudio pero no alterándolos sino generando nuevos paradigmas y conocimientos
POR: Lina Rocío Barbosa Dueñas 310098
Milany Patricia Pallares Carrascal 310103
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